21
ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016
AÑO I - Nº 2 - NOVIEMBRE 2016
de crear hipótesis propias acerca
de este sistema de representación.
Descubrieron que esto es un pro-
ceso universal dentro de un siste-
ma alfabético como el nuestro, ya
que todos los niños pasan por los
siguientes niveles lectoescritores:
Nivel 1: Escrituras presilábicas
indiferenciadas.
• Escribir el nombre del objeto es
el dibujo en sí mismo.
• Los niños descubren la diferen-
cia entre el dibujo y la escritura.
• Conocen el texto como porta-
dor de significado.
• Simulan la escritura con gara-
batos, letras que conocen o le-
tras inventadas.
• Emplean una misma serie de
grafías para diferentes pala-
bras.
Nivel 2. Escrituras presilábicas
diferenciadas.
• Hacen distinción de grafías
para palabras distintas.
• Varía el número de letras en
función del tamaño del objeto.
Nivel 3. Escrituras silábicas.
• Se sucede la fonetización de
la escritura: existe una corres-
pondencia entre lo que suena y
cómo se escribe.
• Primeramente aparece la ma-
nifestación silábica: se da una
correspondencia cuantitativa
en donde la cantidad de sílabas
corresponde a la cantidad de
letras. E O A = PELOTA.
• Después, se sucede la manifes-
tación silábica-vocálica: escri-
ben una vocal por sílaba, aun-
que no corresponde siempre
con el valor sonoro de la sílaba.
E O P = PELUCHE.
• Posteriormente, se dan las aso-
ciaciones silábicas-vocálicas
con valor silábico fijo: escriben
una vocal por sílaba que se co-
rresponde con el valor sonoro.
IA = SILLA.
• Finalmente, aparecen las ma-
nifestaciones silábicas conso-
nantes: escriben una conso-
nante por sílaba. G M =GOMA.
Nivel 4. Escrituras silábicas-alfa-
béticas.
• Usan más de una grafía para
cada sílaba, que corresponde
con el sonido pero omiten algu-
na grafía. PA O = PA TO.
Nivel 5. Escrituras alfabéticas.
• Se da una correspondencia en-
tre el sonido y la grafía del fone-
ma correcta.
Antes de ir a la escuela y conver-
tirse en lectores convencionales,
los niños descubren el lenguaje a
través de etiquetas, carteles, pu-
blicidad, prensa, cuentos… siendo
capaces de interpretar ciertos signi-
ficados de un texto si son acompa-
ñados por imágenes, adentrándose
y comprendiendo las funciones de
la lectura y la escritura dentro de su
grupo social. Por ello, la lectura no
convencional como ojear cuentos y
revistas, o la escucha de los mis-
mos, es muy importante en el de-
sarrollo del niño, ya que le favorece
y predispone hacia la construcción
temprana de significados textuales.
Siguiendo con Ferreiro y Tebe-
rosky (1979), y completando lo que
antes apuntamos sobre sus estu-
dios en el desarrollo de la escritura,
podemos establecer tres períodos
en la evolución de, en este caso, la
lectura:
Lectura prealfabética
Se trata de niños que no cono-
cen el alfabeto y hacen hipótesis
sobre la información contextual de
la palabra escrita. Por ejemplo, son
capaces de interpretar que una pa-
labra escrita bajo la foto del mar sea
por ejemplo “Verano”.
Lectura alfabética
El niño comprende y discrimina
progresivamente las letras, sílabas,
palabras y frases. Al principio leerá
incorrectamente algunas palabras
que tengan letras semejantes; des-
pués su lectura pasará a ser exacta
y las palabras con letras semejan-
tes rara vez serán ya confundidas.