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ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016

AÑO IV - Nº 16 - DICIEMBRE 2019

Así pues, es necesario citar los

beneficios

que, tanto para el alum-

no como para el profesor, tienen la

aplicación de las TIC (Díaz-Barriga,

2013):

Motivación e interés:

El alumno

se encontrará más motivado si la

materia es atractiva y si le permite

investigar de una forma sencilla

utilizando las herramientas TIC.

El docente, utilizando habitual-

mente medios informáticos, des-

pertará la motivación del alumno

y le hará tomar más interés por

los contenidos expuestos.

• Rapidez e inmediatez:

Gracias al

uso de las TIC, se puede contar

en el aula con un número ilimi-

tado de recursos educativos que

nos permiten acceder a todo tipo

de contenidos de forma veloz y en

tiempo real.

• Interactividad y comunicación:

El alumno puede interactuar y

comunicarse con otros compa-

ñeros, enriqueciendo en gran

medida su aprendizaje. Además,

el diálogo profesor-estudiante

también puede prolongarse hasta

salir del propio aula.

• Cooperación y colaboración:

Las

TIC posibilitan la realización de

experiencias, trabajos o proyec-

tos en común, siendo más fácil

trabajar juntos, aprender juntos,

e incluso enseñar juntos, si ha-

blamos del papel de los docentes.

• Aprendizaje en feedback:

Gra-

cias a la retroalimentación que se

consigue con el uso de las nuevas

tecnologías se pueden corregir

los errores que se producen en el

aprendizaje de una manera más

sencilla, puesto que éstos se pro-

ducen y modifican en el mismo

instante.

• Iniciativa y creatividad:

El desa-

rrollo de la iniciativa del alumno,

el desarrollo de su imaginación

y creatividad, y la capacidad de

construir el propio aprendizaje

también es una ventaja de estos

recursos.

• Autonomía y flexibilidad:

Se dis-

ponen de una infinidad de canales

desde donde obtener informa-

ción, pudiéndose producir apren-

dizajes de forma asíncrona, por

lo que se puede ser mucho más

autónomo y flexible.

El mayor y más importante reto

que se desencadena de la incor-

poración de las TIC en la educa-

ción es el fomento del aprendizaje

significativo. En lo que respecta a

los nuevos retos que otorgan las

TIC en la educación, resaltar que

los docentes juegan un papel fun-

damental, ya que deben fomentar

el aprendizaje significativo. Según

Hernández (2017) con la implanta-

ción de los medios tecnológicos se

ayuda a que los estudiantes desa-

rrollen competencias cognitivas y

que puedan aplicarlas en diferen-

tes situaciones. En contraposición,

con la adquisición de habilidades

y competencias a través de dicho

aprendizaje, en las aulas, las he-

rramientas TIC se utilizan para la

búsqueda de información y para la

ampliación de contenidos y conoci-

mientos.

Importancia de la

motivación en el

aprendizaje

El concepto de la motivación eng-

loba y mantiene una holgada tradi-

ción en el campo de la psicología

cognitiva y dicho interés se ha visto

en gran medida reflejado en el ám-

bito educativo, relacionando este

término con el rendimiento acadé-

mico de los estudiantes.

La motivación se entiende como

el proceso que inicia, guía y man-

tiene una conducta orientada ha-

cia un objetivo. Es un estado que

puede conseguir que el aprendizaje

perdure si se encuentran entre am-

bos conexiones lo suficientemente

sólidas.

La motivación conlleva el aumen-

to del interés por parte del alumna-

do, tanto de los contenidos como

de los conceptos que se desarrollan

en cada una de las materias, satis-

faciendo así las necesidades, metas

u objetivos que se planteen. Esta

fuerza o estado debe estar presente

en el docente y en los estudiantes,

ya que el primero debe trabajar de

una forma activa la exposición de

información, el planteamiento de

actividades o proyectos, y el se-

gundo debe afrontar todo ello con

el mismo ímpetu para conseguir

unas determinadas metas.

Sin duda, hay una estrecha rela-

ción entre las metas y la motivación

estudiantil, pudiéndose afirmar

que, en función del objetivo, la mo-

tivación puede ser de una forma u

otra. Giarrocco (2017) expone cua-

tro tipos de motivación fácilmente

reconocibles durante el proceso

educativo: