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Page Background 15 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-20

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AÑO V - Nº 20 - DICIEMBRE 2020

fuerzo: positivo y negativo. El refuer-

zo positivo hace referencia al que da

lugar que el alumno incremente sus

conductas positivas y correctas.

Por otro lado, Vallés (1990) expone

que, el refuerzo positivo da lugar a

aumentar la probabilidad de repetir

conductas correctas por parte de

los niños, ya que se les proporcio-

na un estímulo adecuado para que

se favorezca. Así mismo, este autor

expone el siguiente ejemplo: cuan-

do se da una buena conducta o

comportamiento en un alumno, se

le permite jugar diez minutos con

plastilina. En otras palabras, si los

alumnos aprenden a modificar su

comportamiento en base a las con-

secuencias que este produce, las

conductas disruptivas tendrán una

disminución significativa.

Existen

dos tipos de reforzadores

del comportamiento, los reforzadores

extrínsecos

, que se los da el docen-

te al alumno como, por ejemplo, un

elogio. Por otro lado, los reforzadores

intrínsecos

, que se generan por los

pensamientos o sentimientos de la

propia persona, es decir, son internos.

Como, por ejemplo, el sentimiento de

autosuficiencia (Vallés, 1990).

El refuerzo positivo implica presentar

consecuencias positivas en forma de

recompensas o premios al alumna-

do, inmediatamente después de una

conducta concreta para que, de este

modo, aumente la posibilidad de que

esta conducta se repita en un futuro

(Albert, 2007). Siguiendo en la mis-

ma línea, Skinner (1987, citado Ma-

cLean, 2013), planteó la hipótesis de

que el comportamiento de los alum-

nos se podría entender a través de

la motivación y los refuerzos que los

docentes imponían a los estudiantes.

Así pues, en el aula, los refuerzos a

corto plazo permiten alentar o debili-

tar determinadas conductas.

De la Torre (2003) expone en su

estudio una propuesta basada en el

refuerzo positivo y la economía de

fichas -técnica a la que se hará re-

ferencia más adelante, puesto que

es en la que se basa la aplicación

ClassDojo- como estrategia para la

modificación de la conducta de los

alumnos, de manera que se pueda

reforzar su éxito haciéndoles enten-

der que sus actos tienen consecuen-

cias. Por tanto, dependerá de ellos

que esas consecuencias se convier-

tan en positivas o negativas.

Cabe destacar, como se ha expuesto

en el apartado anterior que, a través

del condicionamiento operante, se

refuerzan o debilitan las conductas

voluntarias asociándolas a reper-

cusiones positivas o negativas; así

que, el refuerzo positivo, permite

que se puedan aumentar determina-

das conductas, por eso, se conside-

ra una posible solución a los TCD,

reforzando las conductas adecua-

das que los alumnos tengan y por

su parte, debilitando las conductas

inadecuadas.

Gamificación

educativa

La gamificación es un término re-

lativamente moderno, que procede

del término anglosajón

gamification

,

cuya raíz es game (juego), aunque

la FUNDEU habla del término ludifi-