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AÑO I - Nº 4 - ABRIL 2017
ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016
FRANCISCO JOSÉ
PAYÁ GARCÍA
• Licenciado en Administración y
Dirección de Empresas
• Graduado en Educación
Primaria
• Profesor de Matemáticas y
Economía en CEP Mirasierra
(Murcia, Murcia)
El espíritu emprendedor en
Educación Primaria
Acercamiento a los contenidos
económicos y financieros
Teniendo presente la necesidad de introducir conceptos de carácter
económico y financiero en la etapa de Educación Primaria dada la nueva
competencia que se incorpora en el currículo relacionada con la iniciativa
emprendedora, es necesario meditar sobre las diferentes metodologías,
instrumentos ymateriales de los que dispone el docente en la actualidad para
alcanzar la meta de guiar y organizar el proceso de enseñanza y aprendizaje
de forma motivadora y significativa para los alumnos, valorando el nivel
abstracto de los contenidos económicos.
Los conceptos económicos
A
mediados de los años 80 ya
se comenzó con la introduc-
ción de conceptos econó-
micos en los últimos cursos de la
Educación General Básica. En con-
creto, en la comunidad autónoma
de Andalucía (Travé, 1997) se trató
de desarrollar una unidad didáctica
sobre dichos contenidos destinada
a ser implementada en Educación
Secundaria, pero sus propios auto-
res manifestaron problemas con la
falta de materiales curriculares, así
como bibliografía relacionada con
la enseñanza de la economía.
La economía es una disciplina
que intenta estudiar de qué manera
podemos solucionar el problema
existente entre las necesidades ili-
mitadas del ser humano y la can-
tidad restringida de recursos natu-
rales, y según la nueva legislación
es algo que los alumnos deben
conocer prontamente pues una de
las nuevas competencias que se ha
incorporado en el currículo de Edu-
cación Primaria a través de la Ley
Orgánica 8/2013, de 9 de diciem-
bre, para la mejora de la calidad
educativa y a su vez en el Real De-
creto 126/2014, de 28 de febrero,
por el que se establece el currículo
básico de la Educación Primaria, ha
sido el sentido de iniciativa y el es-
píritu emprendedor. Podemos de-
finir la economía, por tanto, como
el estudio de la manera en que las
sociedades utilizan los recursos
escasos para producir mercancías
valiosas y distribuirlas entre los di-
ferentes individuos (Samuelson y
Nordhaus, 2005).
Diversos autores consideran que
difícilmente se puede proponer un
currículum de Ciencias Sociales en
la actualidad que prescinda de la
enseñanza de las nociones econó-
micas, aunque así venga sucedien-
do a lo largo de toda la evolución de
nuestro sistema educativo y estas
enseñanzas hayan estado siem-
pre relegadas a un segundo plano.
González y otros (1995) defienden
la incorporación de los contenidos
económicos al currículo con el si-
guiente argumento:
“La adquisi-
ción de las nociones económicas
por los alumnos es imprescindible
para conformar el entramado de
conceptos, habilidades y actitudes
necesarios para el desenvolvimien-
to de los mismos en la sociedad
actual. Cualquier sistema educativo
pretende reproducir y ampliar, en la
medida de sus posibilidades, el sis-
tema económico que lo sustenta,
con el objetivo de responder ade-
cuadamente a las necesidades del
mercado de trabajo y de la propia
producción; pero, además, la ense-
ñanza de estas nociones, constitu-
ye una necesidad apremiante para
la formación básica e integral de
las personas que, a lo largo de su
vida, se ven abocadas a tomar una
serie de decisiones económicas sin
tener suficiente preparación que
les capacite para decidir, de forma