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ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016
AÑO IV - Nº 13 - MARZO 2019
Agentes que
intervienen
Podemos citar varios agentes
que se relacionan directamente con
el fracaso escolar:
Familias
Identificamos el papel de los pa-
dres como agentes de socialización
de primer orden que influyen en
la educación de los niños desde
edades muy tempranas. Podemos
establecer, así, determinantes fa-
miliares o factores de riesgo que
intervienen o se relacionan directa-
mente con el fracaso escolar.
Los padres funcionan como el
medio de transmisión de conoci-
mientos más direco para los niños
durante sus primeros años de vida.
A este respecto, Escudero, Gonzá-
lez y Martínez (2009) afirman que
las expectativas que los padres
crean en torno a sus hijos pueden
influenciarles hasta tal punto de
condicionar plenamente su rendi-
miento académico, pues el papel de
los padres y familias, a través de la
comunicación, puede beneficiar o
entorpecer el proceso educativo del
alumno.
El origen socioeconómico de
la familia también puede llegar a
determinar el rendimiento acadé-
mico del individuo, según Aguilar
(1998). Por lo general, aquellos
alumnos que pertenecen a un en-
torno socioeconómico bajo, más
desfavorecido o que pertenecen a
familias desestructuradas, tienden
a obtener peores resultados acadé-
micos que aquellos otros compa-
ñeros en cuyos hogares predomina
la armonía y pertenecen a una clase
socioeconómica media-alta.
Profesores
Los docentes acompañan al indi-
viduo durante su etapa de escola-
ridad obligatoria constituyendo una
figura de referencia que suele equi-
pararse o sobrepasar, en algunos
casos, a los mismos padres.
Al igual que ocurre con la familia,
las expectativas que los profesores
pongan en sus alumnos pueden
influir significativamente en su ren-
dimiento escolar hasta tal punto de
determinar un fracaso en su etapa
que no se corresponde con la reali-
dad académica del estudiante.
Además de esto, los estudios
también ponen de manifiesto la
notable influencia que poseen
otros factores de aparente menor
trascendencia como los distintos
procedimientos de evaluación que
lleva a cabo el docente e, incluso,
la misma relación profesor-alumno
en el fracaso escolar del alumnado.
De tal manera, siguiendo a Fulla-
na (1998), una buena relación de
reciprocidad entre ambas partes
ayuda al éxito académico, mientras
que una mala o nula relación entre
ambas partes puede llegar a influir
negativamente hasta el punto de
determinar sentimientos de odio o
desmotivación ante la escuela y ha-
cia todo lo que le rodea.
Alumnos
Finalmente, como tercer agente
y variable de influencia en el pro-
blema de fracaso escolar encontra-
mos a los propios alumnos, que se
constituyen en determinantes de
tipo personal. Estos determinantes
personales del alumno, entre los
que podemos encontrar la autoes-
tima, la motivación ante la escuela,
el estudio o el autoconcepto acadé-
mico que pueda tener el sujeto de
sí mismo y de sus expectativas de
futuro pueden llevar, en caso de ser
negativas, a un fracaso y posterior
abandono escolar. Al contrario, si
estos aspectos son tomados po-
sitivamente el alumno estará en
óptimas condiciones de completar
con éxito la etapa de escolaridad
correspondiente.
Detección, evaluación,
diagnóstico y
prevención
La detección temprana resulta
de trascendental importancia ante
el problema del abandono escolar,
puesto que si logramos averiguar
con la suficiente antelación qué
alumnos presentan mayores difi-
cultades escolares estaremos en
disposición adecuada de intervenir
correctamente para tratar de solu-
cionar esta realidad, evitando que
sus problemas presentes y futu-
ros en materia académica se vean
incrementados. De este modo, se-
gún palabras de Escudero (2011),
se ayudaría a una mejor inclusión
educativa del alumno y se reduciría
el riesgo de exclusión social duran-
te su etapa de escolaridad.
Si atendemos a los factores de
riesgo enunciados en el aparta-
do anterior, podemos deducir que