Una verdadera educación no consiste sólo en enseñar al alumno, sino que es necesario hacerlo aprender por él mismo, procurando activar sus mecanismos de resolución de problemas y haciendo que se enfrente a dificultades, pues se aprende sobre todo cuando es uno mismo el que se enfrenta a los problemas y consigue, por sí mismo, superarlos. Por tanto, una educación que potencie la resolución de problemas y el protagonismo del alumno será una educación activa, basada en la acción y en la actividad del discente.
Las claves de esta forma de aprendizaje son, entre otras, la manipulación y la exploración, lo que se va a traducir en una situación generadora de conocimiento. Educar y enseñar mediante la acción es uno de los principios pedagógicos sobre los que se basa el juego como metodología educativa. La acción directa que mantienen los niños sobre los objetos y las situaciones aumenta la probabilidad de generar aprendizajes por descubrimiento y, en consecuencia, aprendizajes más duraderos y consistentes en el tiempo. Así pues, las metodologías activas potencian un proceso cíclico de aprendizaje y descubrimiento que acaba siendo la esencia del proceso educativo: experimentación - acción - descubrimiento - aprendizaje - conocimiento.
En estas suposiciones reside la importancia de trabajar con los niños en un entorno lúdico y creativo, con recursos que faciliten los descubrimientos y favorezcan las situaciones de exploración. Ellos son los protagonistas de su propio aprendizaje y por medio de sus labores de observación, manipulación y experimentación comprenden la realidad del mundo que les rodea, incrementando su desarrollo cognitivo de forma considerable y generando nuevos patrones de conocimiento. Por consiguiente, podemos afirmar que los pilares de un aprendizaje sólido y construido mediante la actividad lúdica será aquel que se fundamenta en la observación y la exploración.
La observación es una actividad cognitiva básica, pues es la primera operación a realizar para poder aprehender la realidad. La observación es una tendencia espontánea del niño que ya desde sus primeros días y meses de vida, constituye la actividad exploratoria dominante. Considerando la observación en toda su magnitud podemos distinguir dos tipos:
Observación espontánea: Este tipo de observación es la que sucede de forma natural, en los actos cotidianos del niño, presentándose de forma no dirigida.
Observación sistemática: Es un tipo de observación dirigida, por parte del adulto o el docente, quien plantea determinadas observaciones a los niños, sugiriéndoles los objetos o los espacios sobre los cuales dirigir su atención y observación.
La exploración es una actividad que permite el descubrimiento y el desarrollo de diversas posibilidades en relación al medio y gracias a la actividad y acciones del cuerpo. Los niños no solamente observan lo que les rodea, sino que intervienen sobre aquello que perciben explorándolo con todos sus sentidos. La exploración será tanto más rica cuantos más sentidos intervengan por lo que es necesario que en las actividades y propuestas que lleven a cabo en la escuela se les proporcionen la mayor cantidad posible de sensaciones y vivencias.
La observación y la exploración son los pasos previos para la experimentación y el desarrollo del espíritu científico, y la curiosidad y el interés innato que sienten los niños por todo lo que los rodea constituye la fuerza motivadora en torno a la cual los docentes han de proyectar propuestas de exploración y experimentación aprovechando, de una parte, las exploraciones espontáneas que realizan los niños constantemente y, de otra, provocar situaciones concretas de investigación en torno a hechos, materiales o momentos significativos.
Dentro del entorno lúdico que se proporcione al niño habrá cabida tanto para el juego individual como para el grupal, y en ambos se deberá considerar la posibilidad de observación y exploración para que se produzca el aprendizaje. En el caso del aprendizaje individual el niño realizará sus propios hallazgos y construirá, de forma personal, su propio aprendizaje. En el caso del juego colectivo se desencadenarán unas condiciones para que, no ya sólo se produzca el descubrimiento y, por tanto, el aprendizaje, sino que se facilitará que el aprendizaje se extienda hacia aquellos individuos que aún no han descubierto nada. Más adelante se considerará este tipo de aprendizaje.
“Sólo el conocimiento que llega desde dentro es el verdadero conocimiento”. Sócrates (470 a. C. - 399 a. C.). Filósofo griego.
El Aprendizaje por descubrimiento y el Aprendizaje Significativo son términos que se enclavan dentro de la psicología cognitiva, en concreto en el modelo constructivista. El modelo constructivista es el marco donde se incluye el diseño curricular de nuestro actual sistema educativo, donde cobran especial importancia las teorías sociales y el aprendizaje basado en la actividad, como dijimos anteriormente.
El desarrollo cognitivo es el conjunto de transformaciones que se dan en el transcurso de la vida de una persona, a través del cual se aumentan los conocimientos y las habilidades para percibir, pensar y comprender. La cognición entraña procesos de adquisición, transformación, organización, retención, recuperación y uso de la información, estando vinculado a la capacidad natural que tienen los seres humanos para adaptarse e integrarse en su medio ambiente. Desde el nacimiento ya se poseen potencialidades cognitivas dispuestas a desarrollarse, pero el modo en el que lo hagan dependerá del tipo y de la forma de interacción que mantenga el niño con el medio ambiente. El estudio de esta cognición depende de la Psicología Cognitiva.
Para la psicología cognitiva, nuestros pensamientos y expectativas afectan profundamente nuestras actitudes, creencias, valores, supuestos y acciones. Esta doctrina se encarga del estudio de los mecanismos básicos a través de los cuales se elabora el conocimiento y se preocupa por entender cómo las personas reelaboran la información captada del medio, transformándola y adaptándola a sus esquemas mentales.
El constructivismo es la corriente psicológica que mantiene que una persona es capaz de construir su propio conocimiento a través de las interacciones que mantiene con su entorno. Uno de los principales autores de esta teoría es Jean Piaget, psicólogo y epistemólogo suizo.
Piaget definió su teoría como Epistemología Genética: para él, el ser humano es un ser fundamentalmente activo en la construcción de su propio aprendizaje y determinó que conocer cómo piensan los niños es mucho más revelador de la capacidad mental que conocer qué saben. Afirmó que el desarrollo cognitivo se distinguía principalmente por los procesos de adaptación (asimilación y acomodación) constantes en el medio, a través de los cuales los seres humanos buscan su equilibrio cognitiva y se produce el avance del intelecto. Piaget diferenció, además, varias etapas o estadios para describir el desarrollo intelectual de los seres humanos hasta la adultez, y es uno de los teóricos más estudiados en el campo de las ciencias de la educación.
El constructivismo se basa en que:
Así pues, el Aprendizaje por descubrimiento es un tipo de aprendizaje constructivo. El Aprendizaje por descubrimiento es un tipo de aprendizaje que se entiende como actividad autorreguladora de investigación, a través de la resolución significativa de problemasa, y el resultado producido ha de conllevar un cambio relativamente estable en la competencia del sujeto.
El aprendizaje por descubrimiento es un tipo de aprendizaje que adquiere un individuo cuando aprende algo por él mismo, poniendo en práctica todas sus habilidades cognoscitivas, de tal forma que aprende atribuyendo a la nueva información mucho más sentido, haciendo que aquello que aprende perdure mucho más en el tiempo.
El máximo exponente de esta teoría es Bruner, psicólogo estadounidense. afirmaba que el niño aprendía a través de los medios y estrategias que busca él mismo para llegar a obtener la información necesaria del medio, de tal forma que el aprendizaje es algo que emana de él mismo.
El Aprendizaje Significativo , por su parte, tiene lugar cuando el alumno es capaz de establecer relaciones entre la nueva información que está a punto de aprender con los conocimientos previos que ya posee, de tal forma que se produce, entre nueva y antigua información, una relación de significados que aportan consistencia al proceso de aprendizaje. Ausubel ha sido uno de los estudiosos que más han reflexionado sobre este aspecto.
Este psicólogo y pedagogo estadounidense considera que el Aprendizaje por descubrimiento no debe ser presentado como opuesto al aprendizaje por exposición, que puede ser igualmente efectivo si se incorpora correctamente a la estructura cognitiva del alumno, haciéndole relacionar lo nuevo con lo que ya sabe y produciendo un aprendizaje realmente significativo.
El aprendizaje por descubrimiento se basa en los siguientes principios:
Las condiciones que hacen que se produzcan aprendizajes basados en el descubrimiento son las siguientes: