51 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016 Nº 35 - SEPTIEMBRE 2024 mayores beneficios económicos. Hornby (2000) también destaca la mejora en los hábitos de estudio, las expectativas de los padres sobre el rendimiento de los hijos y la comunicación padres-hijos, al tiempo que disminuyen las conductas disruptivas en el aula. Para Martínez (1992), hay una idea común que engloba dos componentes relacionados: cuando los padres participan activamente en el centro escolar, los hijos incrementan su rendimiento académico y, además, el centro mejora su calidad educativa, por lo que se considera que estos son centros más eficaces en el desempeño de su labor formativa. En la mayoría de los países europeos, la participación de los padres en la escuela comenzó hacia la década de los 70 (Finlandia, Alemania o los Países Bajos, mientras que en Inglaterra y Gales tienen tanto poder de participación que los padres, a través de los Consejos de Centro, eligen al director (Eurydice, 1997). Varios estudios han señalado los obstáculos que encuentran los padres en relación con la escuela. Walther (2013) dice que los directores y profesores suelen aludir a la indiferencia que muestra un gran número de padres sobre esta cuestión. La apatía o la falta de interés de los padres por tomar parte en la vida de la escuela es el mayor impedimento para la participación. Otro obstáculo es el hecho de que las familias delegan muchas funciones y responsabilidades en la escuela, evitando las suyas. Por su parte, los padres manifiestan que el principal obstáculo que encuentran es la resistencia que aún existe entre el profesorado hacia la participación familiar. Algunas de las medidas que se han tomado en pro de la participación de los padres incluyen la organización de fiestas, actividades extraescolares, etc. Los profesores necesitan la colaboración de la familia, ya que asumir aisladamente la tarea educativa es fuente de tensiones y desmoralización para los docentes (Bolívar, 2006). Todos los países europeos tienen formas organizadas para favorecer la participación de las familias en la gestión del sistema escolar (Eurydice, 1997). Las dos formas formales más relevantes para la participación de las familias en la institución educativa son: las asociaciones de padres y los órganos en los que están representados los miembros de la comunidad educativa. Las asociaciones de padres existen en todos los Estados miembros de la Unión Europea y suelen organizarse en federaciones y confederaciones regionales y nacionales. Los padres se adscriben a ellas de manera voluntaria y se financian con las cuotas de sus miembros. Son autónomas en el funcionamiento y están formadas por los padres y madres de los alumnos, excepto en Inglaterra y Gales y en Escocia, donde además de los padres, están conformadas por los profesores. Sus principales funciones son: la organización de salidas, visitas culturales y actividades de tiempo libre para los alumnos, formación de padres (escuelas de padres) y mejoras para los centros. A nivel europeo son significativas las siguientes: • La Confederación de Organizaciones Familiares de la Unión Europea (Confederation of Family Organizations in the European Union, COFACE). Creada en 1958, colabora con las instituciones europeas en todos los sectores relacionados con los derechos e intereses de las familias. • La Asociación Europea de Padres (European Parents Association, EPA). Fundada en 1985, en Milán, para establecer una asociación de los padres y familias de toda Europa. • La Agrupación Internacional de Asociaciones de Padres de la Enseñanza Católica (Groupement International des Associations de Parents de l’Enseignement Catholique, OE-GIAPEC), que desde 1987 agrupa a las Asociaciones de Padres de Alumnos de la Enseñanza Católica en Europa. La LOMLOE y la participación familiar La LOMLOE fomenta la participación familiar en el centro educativo a través de tres ejes principales: • En el preámbulo de la ley se menciona que, en el segundo curso de educación secundaria obligatoria, todos los centros realizarán una evaluación de diagnóstico de las competencias adquiridas por su alumnado, de la cual se informará a la familia del alumnado. • La libre elección de centro por parte de las familias para sus hijos (artículo 86). • La participación de las familias en determinadas actividades del centro y en el consejo escolar (artículo 56). Propuesta de tutoría La propuesta se realiza para las familias de los alumnos de 3º y 4º de la ESO en un centro educativo ubicado en un barrio postindustrial de nivel socioeconómico y cultural medio-bajo, con una tasa de paro superior al 20%. En el barrio es frecuente ver a alumnos deambulando por las calles en horario lectivo (absentismo escolar) y un desinterés general por el mundo académico. El uso de sustancias como el tabaco y el alcohol es frecuente en parte de la población adolescente. La propuesta toma en cuenta a las familias del barrio anteriormente descrito, cuyos hijos tienen entre 14 y 16 años de edad. Se trata de padres que muestran una predisposición positiva hacia la inculcación de valores beneficiosos en sus hijos, tales como la educación para una vida saludable y la mejora del rendimiento académico de los hijos. Los objetivos que se pretenden lograr con esta propuesta son: • Reducir el consumo de sustancias nocivas por parte de sus hijos.
RkJQdWJsaXNoZXIy MTY1NTA=