RDD-N35-Septiembre-2024

28 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016 Nº 35 - SEPTIEMBRE 2024 servación y la protección de los ecosistemas. >> Realizar actividades de observación de la flora y fauna, participar en talleres prácticos y recibir información de expertos en conservación. • Diseño y ejecución de proyectos ambientales: >> Desafiar a los estudiantes a diseñar y ejecutar proyectos ambientales en la escuela o la comunidad, centrándose en temas específicos como la conservación del agua, la reducción del uso de plásticos o la restauración de áreas degradadas. >> Fomentar la participación activa de los estudiantes en todas las etapas del proyecto, incluyendo la investigación, la planificación, la implementación y la evaluación de los resultados. • Participación en programas de voluntariado ambiental: >> Promover la participación de los estudiantes en programas de voluntariado ambiental, como la limpieza de playas, la reforestación de áreas degradadas o la construcción de hábitats para la fauna local. >> Estas actividades prácticas permiten a los estudiantes ver directamente el impacto de sus acciones y desarrollar un sentido de responsabilidad hacia el medio ambiente. • Arte y expresión creativa: >> Fomentar la expresión creativa a través del arte y la música, brindando a los estudiantes la oportunidad de comunicar mensajes relacionados con el medio ambiente y la sostenibilidad. >> Realizar proyectos artísticos utilizando materiales reciclados o crear música y canciones que transmitan mensajes sobre la importancia de la protección del medio ambiente. En resumen, los proyectos y actividades desempeñan un papel crucial en la educación ambiental al permitir que los estudiantes se involucren de manera activa y directa en la comprensión y resolución de los desafíos ambientales. Estrategias escolares como los huertos, el reciclaje, el monitoreo de recursos naturales, las campañas de sensibilización, los proyectos de energía renovable y muchas otras, brindan a los estudiantes experiencias que promueven la conciencia ambiental y el compromiso con la sostenibilidad. Estas actividades también fomentan el trabajo en equipo, el pensamiento crítico y el desarrollo de habilidades prácticas, preparando a los estudiantes para convertirse en ciudadanos responsables y comprometidos con la protección y conservación del medio ambiente. Educar en un centro sostenible Comenzar a desarrollar el tema que nos ocupa desde un centro sostenible es lo que se llama “predicar con el ejemplo”. Imaginemos un mundo donde comenzamos a incluir el cuidado del medio ambiente en el currículo realizando una práctica real. Si estudiamos en un centro educativo la necesidad de cuidar el medio ambiente, debemos hacerlo empezando por un sistema educativo sostenible, desde sus leyes hasta sus infraestructuras en cada centro educativo. Imaginemos un centro educativo cuyo uso eléctrico sea sostenible a base de placas solares. Es una inversión que generará beneficios desde el inicio de su instalación. Hacer sostenible un centro educativo implica implementar medidas que reduzcan el consumo de recursos como la electricidad y el agua, así como promover prácticas que minimicen el impacto ambiental. Igualmente, algunas consideraciones sobre este tema que podemos plantearnos aluden a la legislación, la dotación económica y los contenidos curriculares. Las leyes y políticas fundamentan un marco normativo que guía y regula las acciones en materia de sostenibilidad en los centros educativos. Estas normativas pueden incluir requisitos de eficiencia energética, gestión de residuos, uso responsable del agua y otros aspectos relacionados con la sostenibilidad. Establecer un marco legal claro y sólido proporciona una base para que los centros educativos adopten medidas sostenibles de manera consistente y con responsabilidad. Es fundamental ofrecer incentivos económicos para fomentar a los

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