RDD-N34-Junio-2024

42 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016 Nº 34 - JUNIO 2024 de la educación, existen interesantes referentes relacionados con todos los niveles educativos (Conde, 2015; Camacho, 2016). En un mundo en el que la tecnología es el eje para resolver los asuntos cotidianos, resulta muy necesario la introducción de metodologías como el DT con el fin de apostar por estudiantes más creativos, competentes y empáticos con todo lo que les rodea. Los problemas y oportunidades con los que se enfrentarán los estudiantes son muy distintos a los que tuvieron que afrontar otras generaciones, por lo que nos encontramos ante una gran oportunidad de dotar a nuestros alumnos de recursos y herramientas que verdaderamente les resulten necesarias. Este pensamiento de diseño no solo debe ser visto como un paradigma metodológico que ofrezca soluciones a los estudiantes, además debe ayudarles a construir su propio aprendizaje, desarrollando aquellas habilidades y competencias necesarias en todos aquellos ámbitos y situaciones a las que se puedan enfrentar en un futuro ya fuera de su vida académica. En este artículo queremos presentar algunas de las reflexiones obtenidas del estudio, la práctica y la implantación de esta metodología en un contexto de enseñanza aprendizaje real valorando cuales han sido los beneficios de la utilización del DT, concretamente en su fase de prototipado. Contexto El objeto de esta experiencia se centra en estudiar los beneficios de la fase de prototipado utilizando la metodología DT dentro de un proyecto3 de la asignatura de Diseño de Interfaces Web, perteneciente a los estudios de Ciclo Formativo de Grado Superior en Desarrollo de Aplicaciones Web de segundo curso. En esta asignatura, como en el resto de materias de la titulación, la creación de prototipos y su testeado será algo primordial, con el fin de generar proyectos y productos de calidad, buscando la viabilidad de cara al usuario. El perfil del alumno de segundo curso, cuenta con una experiencia ya adquirida durante el curso anterior no solo en cuanto a la materia, si no también en la utilización de herramientas y software de trabajo. Creemos, por tanto, que es un buen momento para que a este conocimiento sume la utilización de nuevas metodologías de trabajo como es el DT aportando un valor añadido a sus proyectos de cara a su pronta inserción en las prácticas en empresa y su posterior futuro laboral. Siguiendo con el perfil del alumno y la asignatura en concreto, al tratarse de una materia relacionada con el diseño visual, en este caso de interfaces web, la metodología DT y concretamente la fase de prototipado tiene una amplia aplicación, pues a este nivel los alumnos deben presentar sus proyectos de una forma visual y profesional, debidamente testeados, validando así su correcto funcionamiento. Design thinking como metodología aplicada A la hora de buscar una definición para el DT y consultar la literatura existente encontramos diferentes enfoques. Hay autores como Cross, Dorst y Roozenburg (1992) o Dorst (2009) y Visser (2006) que lo definen como una mezcla de creatividad, analítica y la resolución de problemas. DT es una aproximación a la innovación que es poderosa, efectiva y ampliamente accesible, que puede integrarse en todos los aspectos de los negocios y la sociedad, y que los individuos y los equipos pueden usar para generar ideas innovadoras que se implementen y que por consiguiente tenga un impacto (Brown, 2009). Para Lockwood (2009), el DT se define como un proceso de innovación que se centra en las personas, donde intervienen dimensiones como la observación, la colaboración, el aprendizaje rápido, la visualización de las ideas y el prototipado. Con esto podemos llegar a la conclusión de que el DT se situaría en un punto intermedio entre lo que sería el pensamiento lógico y el pensamiento creativo dentro del proceso de diseño, centrado en las personas y que busca resolver problemas de una forma creativa. El DT es, por tanto, una metodología orientada a la acción, buscando procesos cortos, con resultados óptimos y siempre con la iteración de fondo. Las fases del Design Thinking El DT cuenta con una serie de etapas o fases, estamos hablando de un proceso que trata de abordar retos y poner soluciones a problemas complejos que nos permitirá iterar, por lo tanto, no nos referimos a un proceso lineal. Es por esto que la iteración nos permitirá en el caso de que sea necesario, saltar de unas fases a otras, no teniendo por qué aplicarlas de forma consecutiva. En el año 2012, la universidad de Stanford desarrolla una guía que permite entender paso a paso cómo aplicar la metodología DT a través de cinco etapas: empatizar, definir, idear, prototipar y testear (Institute of Design at Standford, 2012). • Fase de empatía: El proceso debe comenzar con una profunda comprensión de las necesidades de los usuarios implicados en el problema que tratamos de resolver, así como de su entorno. Para ello debemos ser capaces de ponernos en la piel de dichas personas con la finalidad de generar soluciones consecuentes con sus realidades. 3 El proyecto sobre el que se aplicó el proceso de DT trataba de la conceptualización y diseño de una aplicación móvil de domótica. Los alumnos pudieron realizar el proceso completo pasando por todas sus fases, concretamente la fase de prototipo fue fundamental a la hora de desarrollar el proyecto, llegando a generar una maqueta interactiva con el software Figma. Posteriormente este prototipo fue testeado con usuarios finales, recibiendo los alumnos un feedback muy importante a lo hora de proponer mejoras a su proyecto de aplicación.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY1NTA=