RDD-N21-Marzo-2021

29 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016 Nº 21 - MARZO 2021 guiera que el discente aprendiera a jugar tácticamente al deporte que se le presentase, para lo cual se pro- puso el aprendizaje de la toma de decisiones mediante juegos modi- ficados y preguntas generales de razonamiento. El MECD persigue el aprendizaje y la enseñanza de diversos deportes, ale- jándose de la conciencia que se tenía sobre la técnica en la enseñanza tra- dicional de la EF, en la que se diseña- ban unidades de trabajo específicas de un solo deporte, con ejercicios y actividades analíticas, donde la téc- nica era el epicentro del proceso de enseñanza-aprendizaje y la táctica se dejaba solo para las últimas sesio- nes cada unidad didáctica (Navarro Ardoy, Collado y Pellicer, 2020). ¿Qué elementos básicos conformanalmodelode enseñanza comprensiva deldeporte? Aunque la literatura nos muestra muchos y muy variados elementos que conforman al MECD, resaltare- mos tan sólo algunos de los más bá- sicos (Fernández-Río, Calderón, Hor- tigüela, Pérez-Pueyo y Aznar, 2016): 1. La transferencia entre deportes Desde una perspectiva de la lógica interna del juego hay muchas se- mejanzas entre algunos deportes, las cuales han de ser tenidas en cuenta y aprovechadas para lograr un aprendizaje más sencillo y con- textualizado. Por ejemplo, en los deportes de invasión (baloncesto, balonmano, fútbol, rugby, etc.) existen proble- mas tácticos similares como, por ejemplo: mantener la posesión del móvil, progresar hacia la meta rival, conseguir el punto, robar el móvil e impedir la progresión. Estas carac- terísticas son fundamentales ya que permiten avanzar en el conocimiento y la práctica de varios deportes a la vez gracias a sus elementos en co- mún. Así, el óptimo mantenimiento de la posesión en baloncesto ayuda- rá más fácilmente a la consecución de dicho objetivo en otros deportes como el balonmano. 2. Los juegos modificados por re- presentación Dichos juegos deben tener las mis- ma estructura táctica que el deporte real que se pretende enseñar, pero modificados para adaptarlos a las necesidades de los discentes. Por ejemplo, se pueden reducir el número o las dimensiones de los elementos clave del juego: número de jugadores, peso de los móviles, dimensiones de las áreas de juego, etc. Todo esto con el doble fin de disminuir los requerimientos físicos y la complejidad táctica. Dicho esto, cabe recalcar estos jue- gos deben respetar las característi- cas tácticas de la categoría de de- portes a la que pertenece el deporte a tratar. Por ejemplo, en un juego modificado de fútbol no se podría colocar una red en medio del cam- po, puesto el espacio ya no sería co- mún y pasaría a ser alternativo. 3. Los juegos modificados por exa- geración Consiste en que la estructura de estos juegos debe ser alterada para hacer más visible un elemento del juego en concreto (ya sea técnico o táctico) sobre el que se quiera ense- ñar, tratar o profundizar. Por ejemplo, en un juego en el que se pretenda mejorar el pase corto en fútbol sala se podría eliminar la po- sibilidad de conducción y el número de participantes. En bádminton, por ejemplo, se podría establecer que el juego lo gana la pareja que consiga mantener el móvil en juego durante 20 golpes seguidos. 4. La complejidad táctica creciente Señala que los deportes tratados de- ben ser introducidos en clase siguien- do una complejidad táctica creciente, es decir de lo más sencillo a lo más complejo, para que sean más fácil- mente integrados por los estudiantes. Por ejemplo, en deportes de red/ muro, como el voleibol o el bádmin- ton, se debe comenzar con el proble- ma táctico más sencillo (mantener el móvil en juego) para seguir con uno más dificultoso (llevar la iniciativa del juego), y finalizar con otro más complejo (conseguir el punto). 5. La evaluación auténtica Se basa en que la evaluación de la competencia del alumnado debe ser realizada durante la práctica del pro- pio juego, y no en situaciones aisla- das y artificialmente creadas por el profesor. Por ejemplo, evaluar el desempeño del alumnado durante una buena parte de las sesiones de la unidad didáctica con una rúbrica. Para concluir, comentar que los jue- gos modificados propuestos en este modelo pueden ser a la misma vez tanto de representación como de exa- geración. Por ejemplo, un juego de ba- loncesto que cuente con menos parti- cipantes y que obligue a los alumnos a tirar desde la línea de tres puntos para trabajar el lanzamiento exterior. ¿Cómo se aplica el mo- delo de enseñanza com- prensivadeldeporte? Generalmente una gran mayoría de autores coincide en que la forma de implementar el modelo com- prensivo en el aula debe realizarse mediante la división de la sesión de EF en varias partes que ayuden a es- tructurar las sesiones (Fernández-Río et al., 2016; Mitchell, Oslin y Griffin, 2013; Navarro Ardoy et al ., 2020). Originalmente Bunker y Thorpe di- vidieron la puesta en marcha de este modelo en seis fases diferentes (Méndez, 2010): 1. Juego: aquí se presenta un jue- go modificado, adaptando el espacio, la meta, el material, el número de jugadores o las re- glas al nivel de desarrollo y ex- periencia del discente. 2. Apreciación del juego: en este paso se pretende que los alum- nos entiendan las reglas prima- rias (número de toques seguidos

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