Un sistema educativo con fecha de caducidad.
El actual sistema educativo, dado los últimos cambios sociales, los avances tecnológicos y la globalización, si lo dejamos permanecer impasible se convertirá en un sistema anacrónico, antiguo, estático y jerarquizado que lejos quedará de dar respuestas a las demandas de la nueva sociedad. Por tanto, es preciso que se replantee una profunda revisión de dicho sistema y se reorganice desde su estructura más interna y desde tres focos de acción fundamentales: el económico, el cultural y el personal.
Obsolescencia del Sistema Educativo. #CEdRevistaDigitalDocente Share on XACTUALIZACIÓN DEL SISTEMA TRADICIONAL
Índice de contenidos
El Sistema Educativo Tradicional
El sistema educativo tradicional ha sido algo repetitivo y ha estado sumido en la repetición de lecciones, transferidas de profesor a alumno, en un sistema jerarquizado donde el discente era un agente pasivo y donde se le daba prioridad absoluta a las materias de lengua, matemáticas y ciencias, menospreciando las de corte más humanístico y artístico.
En la actualidad, el sistema educativo se impregna de los cambios y avances que se están experimentando en nuestro siglo, y ha de beber de la tecnología, las nuevas metodologías de aprendizaje y los avances en neurodidáctica, lo cual nos indica que lo más correcto es avanzar hacia un paradigma educativo en donde el alumno tenga pleno protagonismo y sea educado para poder hacer uso de todos los medios que tiene a su alcance.
La jerarquización unidireccional docente – alumno debe perder su verticalidad y pasar a ser bidireccional, en un continuo flujo de conocimiento, creando un proceso en donde cada agente mantenga unas nuevas funciones: creador y constructor de significados el discente y guía, orientador y mediador del conocimiento y el proceso educativo el docente.
El cambio de roles y papeles en el proceso educativo responde a uno de los principios fundamentales del constructivismo: el aprendizaje significativo que se produce cuando es el alumno el que se encarga de manejar su propio conocimiento.
Problemas del sistema actual
Es innegable el alto fracaso escolar existente en nuestras aulas, junto a la falta de motivación, como consecuencia de la no renovación por parte del sistema educativo, el cual está obligado a cambiar para potenciar el desarrollo del alumnado de cara a una mejor calidad de vida, tanto presente como futura. Si el docente no cambia y continúa en una visión tradicionalista de la educación lo único que conseguirá será provocar el desencanto, la desmotivación y el aburrimiento de su alumnado. Si hoy día los alumnos pueden acceder a toda la información que deseen desde cualquier parte, lo que hay que conseguir es encender la llama de su curiosidad e instruirles en el uso de instrumentos y herramientas validos que les permitan acceder al conocimiento, compartirlo y crear nuevo.
El papel del docente
El docente del siglo XIX debe ser un profesional reciclado constantemente, con habilidades para proyectar en los alumnos la capacidad de autoconocimiento a través de las herramientas prestadas; moldear los hábitos erróneos; motivar de forma colectiva e individual a la clase, con la finalidad de inquietar sus mentes y descubrir sus capacidades de cara a un horizonte cercano y enseñarles a pensar correctamente (Hutching, 1967).
Aquí el miedo del profesor puede hacerse más que evidente: se encuentra ante alumnos que muchas veces saben la información antes que él, es más, muchas universidades prohíben el uso de Internet durante las clases para evitar continuos desafíos en el aula y que su trabajo no sea cómodo y fácil.
El papel del profesor es reciclarse y ser capaz de usar la tecnología para mejorar el proceso educativo, pero no puede caer en el error de depositar en ella todas sus esperanzas: la tecnología, por sí sola, no podrá nunca mejorar datos ni resultados.
Por su parte, los alumnos se enfrentan a un nuevo papel en el ámbito educativo, donde son una parte activa en este metasistema donde hay que aprovechar las herramientas facilitadas para adquirir conocimientos propios, pensamientos razonados y conclusiones e hipótesis de forma individual y contrastada para poder así pasar a ser adultos de éxito. En la búsqueda de sus destrezas y en el descubrimiento de las mismas es donde el alumno va a sentirse motivado, va a saber en qué es bueno y en qué materias no lo es tanto, para empoderar sus destrezas y mejorar en sus impericias.
La formación y el docente: claves del éxito
Por tanto, la educación debe ser un sistema bidireccional, donde el profesor no tenga miedo a enfrentarse a las nuevas tecnologías y donde sepa transmitir al alumnado de forma no tan obsoleta ni metódica, unas pautas para extraer la información válida, interpretarla, y transformarla en conocimiento para ser razonado de forma crítica y autónoma en el conjunto de la sociedad, que en este caso sería la escuela, y en su ámbito privado, la familia o amigos.
La motivación en los profesionales de la docencia está presente, entre otras cosas, debido a la falta de apoyos que está recibiendo este colectivo en la actualidad y ello se debe remediar, ya que sin un profesor motivado, el alumno tampoco lo estará. El sistema educativo debería fomentar sistemas de asesoramiento, seguimiento y formación para aquel que no haya trabajado las herramientas de transmisión de habilidades y motivación al alumnado en su período profesional –ya bien por rechazo o desconocimiento- para así conseguir un modelo educativo exitoso.
El mundo globalizado en el que vivimos hace que la formación sea clave, imprescindible en todos y cada y uno de los actores de la vida y que el profesor entienda que él debe regenerarse sin miedos porque tiene las claves del éxito para poder transmitir al alumnado.
Sin motivación no hay resultado y sin éste la sociedad se verá llena de adultos frustrados que no son capaces de generar conocimiento, simplemente de buscar información y recitarla.
El conocimiento real es escaso en la actualidad y es necesario fomentarlo en todo los ámbitos para que los jóvenes del hoy sean los grandes exitosos del mañana.
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El artículo Obsolescencia del sistema educativo. Influjo de la globalización y las nuevas tecnologías forma parte del número 5 de Campus Educación Revista Digital Docente un proyecto destinado a la divulgación de publicaciones de carácter educativo que permite la difusión del conocimiento y pretende el enriquecimiento de toda la comunidad educativa.
