¿Cómo elaborar la Programación Didáctica en Infantil y Primaria según LOMLOE?

Aprende a elaborar la Programación Didáctica para las etapas de Educación Infantil y Educación Primaria.

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Las programaciones didácticas, sea para la etapa que sea, en general, suelen presentar una estructura similar. Todas ellas comprenden ciertos apartados que se mantienen más o menos inalterables a la hora de confeccionarlas, además de otros que son de obligada inclusión en todas ellas.

No obstante, cada etapa educativa tiene particularidades únicas, por lo que hay que ajustar la programación didáctica acorde al ciclo, curso o nivel específico, principalmente de cara a las oposiciones docentes.

En este articulo analizaremos algunas de las principales señas de identidad de la programación didáctica para las etapas de la Educación Infantil y la Educación Primaria.

Presentación de la Programación Didáctica

La introducción, justificación o presentación (puede llamarse como prefiera) es el primer apartado de toda programación didáctica que, a decir verdad, ha de ser relativamente sencillo y no ocupar demasiada extensión.

En este primer punto se pueden integrar tanto la propia presentación del documento como su justificación didáctica y legal. Esto quiere decir que deberemos proporcionar una argumentación propia en relación a la importancia de programar la intervención educativa, así como incluir el marco normativo bajo el que nos acogeremos para llevar a cabo la planificación del proceso de enseñanza-aprendizaje.

En una programación para Educación Infantil conviene resaltar brevemente la importancia de programar desde un enfoque globalizador para adecuarnos a las características propias tanto de la etapa como de los niños de estas edades, además de resaltar lo que se pretende conseguir en los alumnos con la puesta en práctica de esta programación en particular.

Si es para Educación Primaria, es preciso comentar lo fundamental que es programar teniendo en cuenta la importancia del desarrollo competencial y describir el área o materia sobre la que se va a programar. Para hacer esto último, es muy útil haber consultado previamente las primeras disposiciones que aparecen en los currículos oficiales de la comunidad en cuestión, pues ahí se detallan características muy interesantes y que el tribunal suele tener en cuenta debido a la impresión que causa de ser un aspirante conocedor de la legislación.

Currículo LOMLOE de la Educación Infantil

Currículo LOMLOE de la Educación Primaria

Descripción del entorno en la Programación Didáctica

El siguiente apartado en el que habremos de enfocarnos es en la contextualización. Con la contextualización nos estamos refiriendo a todas las circunstancias y elementos que envuelven el desarrollo de nuestra práctica educativa. Es decir, tanto al entorno en sí mismo como a cualquier otro elemento que pueda determinar los procesos didácticos y pedagógicos en el transcurso de nuestra programación.

En esta descripción del contexto tendríamos que mencionar las características del entorno de mayor a menos cercanía e influencia: nuestra Comunidad Autónoma, la localidad en la que nos ubicamos, el barrio en el que nos encontramos, el centro educativo en el que impartimos docencia y, finalmente, nuestra aula, punto que usaremos para enlazar con el siguiente apartado.

A grandes rasgos, debemos mencionar algo sobre el patrimonio artístico y la cultura popular de nuestra tierra, así como sus características naturales, tradiciones y costumbres.

Posteriormente, debemos pasar a concretar la ubicación del centro escolar en una localidad determinada. Si bien no es aconsejable mencionar un municipio determinado, no está de más ofrecer algunas pistas sobre el mismo, como resaltar algún monumento de marcado interés histórico o alguna tradición popular que pueda ser objeto de especial mención.

Finalmente, conviene mencionar rápidamente las características más esenciales del barrio donde se encuentra el colegio, incidiendo en el nivel socio-económico del mismo y de las familias, comentando qué tipo de familia es la dominante, las profesiones más habituales y los recursos culturales y educativos de los que suelen disponer y, por tanto, ofrecen a sus hijos.

Para finalizar este apartado se tendrán que considerar las características específicas del alumnado que conforma el grupo-clase; de esta manera podríamos enlazar con el epígrafe que trabajaremos a continuación.

Características de la etapa en la Programación Didáctica

Otro apartado que, de alguna manera, continúa funcionando como contextualización, es el que trata sobre las características de etapa, ya que en él tendremos que abordar las connotaciones relevantes sobre nuestro nivel educativo, nuestra área y nuestros alumnos.

Para abarcar las características de etapa, tenemos la opción de incluir un breve resumen de las principales características de la especialidad por la que optamos (en este caso, Infantil o Primaria) para abordar, seguidamente, las características generales del alumnado de la misma, para lo cual tendríamos que considerar sus características psicoevolutivas.

En el caso de Educación Infantil es preciso mencionar las tres áreas de conocimiento y experiencia (Crecimiento en Armonía; Descubrimiento y Exploración del Entorno; Comunicación y Representación de la Realidad), que se entienden como unidades curriculares mediante las cuales organizar los contenidos educativos desde ámbitos de la experiencia y el desarrollo infantil intrínsecamente relacionados entre sí. Las áreas se conectan con los intereses y nivel madurativo de los niños de estas edades y permiten un tratamiento integrador de la enseñanza, gracias a la configuración de situaciones de aprendizaje significativas, globales y estimulantes.

En Educación Primaria, en cambio, tendríamos que comentar el área específica por la que estemos programando (Conocimiento del Medio Natural, Social y Cultural; Educación Física, Lengua Castellana y Literatura; etc.). Las áreas en Primaria organizan el currículo y tienen carácter global e integrador, estando orientadas al desarrollo de competencias del alumnado y pudiéndose, algunas de ellas, desdoblar en otras, de igual forma que, dependiendo de lo que dicten las distintas administraciones, éstas podrán organizarse en ámbitos. Así pues, las áreas en Educación Primaria son estructuras de conocimiento que presentan los contenidos educativos aglutinados por disciplinas y en un rango de dificultad propio para cada curso escolar.

Objetivos, Competencias clave y Saberes básicos en la Programación Didáctica

En todos los apartados de la programación en que hablemos de elementos curriculares concretos debemos proporcionar una definición precisa, y es aconsejable que sea de elaboración propia por parte del aspirante.

Objetivos en la Programación Didáctica de Infantil y Primaria

Los objetivos se definen desde la LOMLOE y los Reales Decretos de enseñanzas mínimas como los logros que se espera que el alumnado haya alcanzado al finalizar la etapa y cuya consecución está vinculada a la adquisición de las competencias clave.

A la hora de considerarlos se tendrá que aludir tanto a los objetivos generales de etapa, que hacen referencia a los logros que se supone los alumnos deben alcanzar una vez hayan finalizado la etapa, y los objetivos de área, aquéllos que constituyen capacidades relacionadas con una única área o materia para toda la etapa, y son concretados en los Reales Decretos de enseñanzas mínimas y decretos de currículo en las distintas Comunidades Autónomas. Estos últimos sólo los necesitaríamos para la Educación Primaria.

Competencias clave en la Programación Didáctica de Infantil y Primaria

Definimos las competencias clave, de la forma en que se exponen en la LOMLOE, como los desempeños que se consideran imprescindibles para que el alumnado pueda progresar con garantías de éxito en su itinerario formativo, y afrontar los principales retos y desafíos globales y locales.

Las competencias clave para el aprendizaje permanente se deben desarrollar en el grado y nivel correspondiente para la etapa en la que nos encontremos y en consonancia con el desarrollo del alumnado de la misma. Es por ello que las competencias clave vienen definidas para cada una de las etapas a través de lo que se llama Perfil de salida, una suerte de “medidor” que nos indica la graduación en el avance de las competencias clave tanto al término de la enseñanza básica como al término de la etapa en la que nos encontremos.

En la programación de Educación Primaria tendremos que dejar de manifiesto que nuestro objetivo será desarrollar una educación de corte competencial y, para lograrlo, procuraremos vincular las propuestas didácticas que aparezcan en las distintas unidades que componen la programación con los descriptores operativos del perfil de salida correspondiente al nivel que se espera alcancen nuestros alumnos.

En el caso de Educación Infantil no será preciso mencionar el perfil de salida, pues en esta etapa tan sólo es necesario considerar las competencias específicas con su conexión a los criterios de evaluación, que serán los referentes para conocer el ritmo de desarrollo en cada alumno.

Saberes básicos en la Programación Didáctica de Infantil y Primaria

El tradicional elemento curricular conocido en la legislación educativa como “contenidos” ha pasado a denominarse “saberes básicos”: la LOMLOE indica que los contenidos serán enunciados en forma de saberes básicos.

Estos saberes básicos son los conocimientos, destrezas y actitudes que constituyen los contenidos propios de un área o ámbito y cuyo aprendizaje es necesario para la adquisición de las competencias específicas.

Los saberes básicos de cada una de las tres áreas de Infantil o de las áreas en Primaria quedan establecidos en los Reales Decretos de enseñanzas mínimas, presentados en bloques de contenidos para cada curso. A raíz de esta estructura cada Comunidad Autónoma los concreta en sus propios decretos de currículo.

En este apartado de la programación didáctica no tenemos que copiar todos los contenidos directamente del decreto de currículo, sino que hemos de reflejar la distribución de los distintos saberes básicos de nuestra área/s para el presente curso escolar, secuenciándolos a través de las diferentes unidades didácticas.

Unidades Didácticas de la Programación Didáctica

La programación didáctica terminará con la relación de las distintas unidades didácticas que se van a trabajar en el curso escolar y a lo largo de los tres trimestres.

Así, el aspirante puede confeccionar un cuadrante (a modo de presentación y síntesis) con todas las unidades que va a desarrollar durante el curso, indicando en el mismo el título y su duración prevista en el tiempo, estableciéndolas organizadas por trimestres para, posteriormente, adjuntar cada una de dichas unidades y su desarrollo.

Las unidades didácticas expuestas no han de ocupar demasiado espacio, ya que la extensión de este documento, según la convocatoria de oposiciones, es bastante limitada. Por eso se recomienda que las unidades didácticas recogidas ocupen, cada una de ellas, el máximo de la cara de un folio.

No debemos olvidar incluir en algunas unidades (no necesariamente en todas) la exposición de situaciones de aprendizaje.

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Evidentemente, una Programación Didáctica de Aula completa entraña muchos más aspectos que los recién mencionados, como los mecanismos de evaluación, el diseño universal para el aprendizaje o la acción tutorial, por ejemplo.

Igualmente, una programación didáctica supone, fundamentalmente, saber enlazar correctamente los objetivos educativos y las competencias clave con el resto de elementos, tales como las competencias específicas y los criterios de evaluación.

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